Erdara, ramat y rameríes
Por Ricardo García Moya
EI lingüista Koldo Mitxelena recoge en su ensayo sobre la lengua vasca (Durango, 1977), que los
euskaldunes de antaño Ilamaban "erdara" a las lenguas románicas peninsulares. L.os vascones
contemporáneos de Joanot Martorell observaban que gallegos, valencianos, aragoneses, castellanos y
catalanes se entendían más o menos con sus lenguas, bien pronunciado lentamente o por el contexto de
la frase; pero ningún usuario de los romances latinos era capaz de entender el vascuence
¿Consecuencia? para los euskaldunes sólo existía el "erdara" como lengua que englobaba a las demás.
Una proposición de este silogismo -fruto de la virginidad cultural- la han retomado los inmersores: "Si catalanes y
valencianos se entienden, hablan la misma lengua". Pero habría que ampliar la igualdad pues, por ejemplo, en las
televisiones de Pujol y Fraga entrevistan en catalán y gallego a personajes como Jesús Gil, alcalde de Marbella,
manteniendo diálogos que serían imposibles con interlocutor vascuence. ¿Cuál es el límite de entendimiento para
considerar idiomas erdaras idénticos? EI asunto no está claro; piensen que el portugués escrito -no el
hablado- tampoco ofrece dificultades para su comprensión.
A pesar de lo dicho, entre las lenguas erdaras hay topes. Este verano, Oriol Cabanyes publicaba sus impresiones sobre
el Misterio de EIche, anotando que "esta casi ópera se canta en valenciano. Pero apenas se entienden cuatro palabras"
("La Vanguardia", 24-8-96). Y eso que el Misteri ha sufrido filtraciones de los "monjos" montserratinos y del
convulso catalanero y tramoyista Gaspar Jaén.
En el artículo, Cabanyes reproduce frases oídas a los ilicitanos normales (no "normalitzats"). Junto al Vinalopó, la
madre de Biel Sansano le preparó un delicioso "arròs en costra" (y Oriol anota fielmente la preposición "en", no el
"amb" del I EC). También recoge los vocablos "vesprà" y "pastorets", respetando el idioma regnícola al no
sustituirlos por los tarda y ramaders del Institut d'Estudis Catalans.
Curiosamente, aunque "ramat" es palabra viva en el Reino de Valencia -con significado de multi- tud y rebaño- no
podemos decir lo mismo de "ramader"; palabreja adorada por CCOO y UGT, pero no recogida por los diccionarios
valencianos anteriores a la inmersión catalanera; y tenían motivo para ello al ser un vulgar arcaísmo peninsular
derivado de "rama". La familia léxica ramat, ramal y ramada eran de las que provocaban en los vascones la creencia
en que aragonés, valen- ciano y castellano eran una sola lengua: el erdara.
Hay otra razón para que los valencianos dedicados al cuidado y comercio de ganado escogieran "pastors y
ganaders", huyendo de ramader y de la inventada (je, je) "ramadería" por la incómoda asociación
semántica con unas señoras que adornaban con ramas las fachadas de sus hogares. Eran "les dones de
cadira o rameres", que trabajaban en "les rameríes". En fin, que rameríes y ramaderíes no coexistieron
léxicamente en la len- gua valenciana hasta la Ilegada de los inmersores y sus entusiastas adeptos: "La
Unió de Llauradors i (con perdón) Ramaders".
EI articulista Cabanyes espera que la lengua hablada en Elche sea más entendible para los catalanes en un futuro; y
está en lo cierto. La Generalidad otorga millones para el desarrollo de la "nostra lengua" ¿Y qué hace el
ramat inmersionista? Organizar la sardanera "Escola d'Estiu, 96" en Elche, y se traen a elementos del
Pompeu Fabra de Barcelona y de la Rovira i Virgili de Tarragona para enseñar el "nostre idioma a els
nens i nenes" (Escola d'Estiu, Elx, 1996, p. 38).
Y mira por dónde, inmersores y Parlamento de Cataluña actúa como los vascos que unificaban lenguas ajenas. Por
suerte, la documentación no manipulada ridiculiza a los inmersores. Así, en 1607 se publicaba en Valencia la erudita
obra "Origen de los indios", en la que el dominico fray Gregorio García describía sus vivencias en América.
Apasionado de la lingüística, tras analizar los idiomas amerindios comentaba sobre los del sur de Europa: "En el
Imperio Romano hubo una lengua general que es la latina, de la cual se inventaron nuevas lenguas, derivándolas de
las misma latina, cuales son italiana, francesa, catalana, valenciana, castellana lusitana" (p. 287). EI dominico
constataba lo que nadie discutía antes de la inmersión: que el valenciano procedía del latín.
(IHuy, con el lío del erdara, rameríes, ramaderíes y la Abradelo que ya dice amb nosaltres en barcelonés, me
olvidaba del último hallazgo filológico.) EI extraño Luis Racionero (Isí, sí, el de los Borja y el ex de la
doctora Ochoa!) ha descubierto que el latín no es el origen del catalán, pues las "payesas de la Seo
d'Urgell y sus paisanos debieron hablar catalán desde la prehistoria" (Racionero, L.: "EI Mediterraneo y los
bárbaros del Norte" Barcelona 1996, p. 113).
Racionero afirma que las legiones de caparras romanos que vegetaban por Tarragona no pudieron influir en el catalán
prelatino.¿Qué apuestan a que el IEC termina diciendo que el catalán fue la madre, el padre y el abuelo del
indoeuropeo?

Las Provincias 31 de Octubre de 1996