Els caragols punchosos de Benicarló
Ricardo García Moya
El diario Levante, espadón del Nuevo Orden idiomático, denunciaba que Agricu1tura traduce al español y al valenciana de la RACV el trabajo de un instituto de Benicarló. En este centro -que ostenta el nombre del manipulador Joan Corominas-, se imparte catalán, como en todos los institutos del Reino. Una de las profesoras, Olga Suárez, se burlaba de la timidez traductora de la Consellería de Agricultura, al haber mantenido la grafía catalana en "punxents, y no cambiar la x por la ch secesionista. La patosa Olga Suárez oculta o ignora ciertos detalles: en primer lugar, punxent es un barbarismo que aparece en Cataluña en el siglo XX, según dice su admirado Corominas: Punxent ha penetrat molt avui en lus general del Principat, i jo mateix lhe usat molt des de c.1925; recordo, però, que abans em xocava (DECLLC). Los colaboracionistas han introducido esta corrupción en el Maestrazgo, pero Olga Suárez jamás podrá exhibir ejemplos de punxents en lengua valenciana, sea en clásicos o en saineteros anteriores a la prostitución idiomática. No sé qué significa en catalán punxents, pero intuyo que en idioma valenciano podría traducirse por punchants, punchosos o coents,
Olga Suárez ironiza sobre la ch secesionista, como si estuviera hablando a indefensos alumnos de ESO, pero no nos engaña. El vocablo punchó según los etimólogos que reverencia la inmersión: Es forma de origen mozárabe... aparece en Eiximenis que, como es sabido, vivía en Valencia y allí recibió gran influencia (DECLLC). Generada en el romance valenciano, la familia léxica de punchó, punchar, puncha..., se propagó posteriormente por la cuña valenciana hacia Lérida; así en el mismo párrafo, Corominas reconoce que estas formas -cambiando la ch por x-, se filtraban hacia el norte: Altrament, ja llavors les formes en x (-ch-), sestaven propagant cap al Nord. Y también por Castilla: la primera documentación de punchar en castellano es en el Corbacho del Arcipreste de Talavera, en 1438, que se había educado en Valencia. Así es, que diría Pocholo, el texto del Corbacho contiene valencianismos que, impunemente, los etimólogos catalanes mangan a placer. El diccionario de la Real Academia de Cultura Valenciana (no confundir con la de Ascensión), registra las voces puncha, punchar, punchó, punchonet, etc.; y esto es algo que la Universidad, el diario Levante y los espíritus sensibles como Olga Suárez o Rita Barberá no pueden admitir. Si el Institut dEstudis Catalans y los comisarios lingüísticos de Tarancón prohíben la ch secesionista ¿por qué insisten los cabrones blaveros? Luego se quejan de que la educada progresía califlque a quien usa la ch como analfabet feixista, fanàtic dUnió Valenciana, fill de puta secessionista, blaver de merda, botiguer inculte, cabró del GAV, etc. En fin, para facilitar la labor a los comisarios lingüísticos, he buceado en la charca y he hallado una serie de secesionistas a los que Olga Suárez puede aplicar el insulto que le apetezca.
Al ignorar quién escribió punchó de lletres y tots los punchons en documentos valencianos de la monedería del 1400 (BDC,XXIV), y como no tiene morbo insultar a desconocidos, doy una relación de textos literarios y nombres de siniestros secesionistas: punchen ab una agulla (St. Vicent: Ms.276 Sermons. h.1408); te pots punchar (Roig Espill, a.1460); no punchen los seus (Fenollar: Procés de les olives, 1497); aquells punchons (Obres fetes en lahor de Sta. Catherina, 1511); tant puncharen los de açí (A. Cat. Val. Liber Antiquitatum, h. 1520); les punches (Pou: Thesaurus, Valencia, 1575); les mans puncha (Salzedo: Vida Hier. Simón, a. 1614, p. 194); en tantes punches (Fiestas Conv. del Carmen, a. 1622, p. 219); encara punches (Maluenda: Endeches en llengua valenciana, a. 1628); punchá lo dimoni (Carbó: Luces de aurora, 1665, p. 333); argolletes y punchó (Llibre de contes de St.Cristofol de Benasal, h.1728); agrostis punchosa (Cavanilles: Obs.1797); a grapats y punchades (Conversacions entre Saro, 1820); els punchonets Roig y Civera: Un chuche, 1873, 12); estic en punches (Ovara: Per tres pesetes, 1881, p.6); puncha, punchar, punchonet... (Diccionari RACV 1997).
El sustantivo punchó se propagó hacia Cataluña a fines del XIV pero el verbo punchar tardó algo más, pues exceptuando el Corbacho, del uso de punchar, fuera del Reino de Valencia, no parece haber documentación anterior al siglo XVII (DECLLC). También reconocen que puncha, aparte de los clásicos, está particularmente arraigado en la toponimia y la botánica valenciana(DECLLC). Hecho evidente, aunque el todopoderoso Servei de Normalització catalana de la Generalidad está traduciendo a toda leche la toponimia valenciana al catalán, en rótulos de todo tipo (San Zaplana, como es santo y levita por el empíreo de las Regiones de Europa, está por encima de debilidades humanas, sean de la pilila o de la lengua valenciana).
El acojone de los traductores del texto de Benicarló también les hizo escribir xics con la x de la norma del IEC; así que, aunque sea un coñazo, les doy otra tanda de analfabetos que escribían chic con la ch secesionista: fadrinetes chiques (St. Vicent: Quart. 15.85, any 1413); sis chiques (Inv. Palau Real a la mort de la Reyna, a. 1458); chiques (Roig, Jaume: Llibre de les dones, 1460); chiquea, chiquet, chiqueta (Esteve: Liber, 1472); lo Senyor guarda los chiquets (Corella, Roiç de: Salteri, 1490); chiquet (Villena, Isabel de: Vita Christi, 1497); chiqueta (Pou: Thesaurus, 1575); als chichs (Taraqona: Inst. dels Furs, 1580); el Pendó chiquet (AHO. Llibre dels obrers de vila,1625); chica exposita (Exulve: Praeclarae artis, 1643); chiquet (Luces de aurora. 1663); chichs de mamella (Ballester, Batiste: Ramellet, 1667); roqueta chiqueta (Llibre de visures de Tirig, 1680); per a la educació dels chichs (Archiu Hist. Oriola, L. 156, f. 102, a. 1686); chica y chiques (Const. Real Casa de Orfene, 1748); els pares del chiquiniu (Balader La capa no sempre tapa, 1876); aquelles chiques (Escalante: El agüelo Cuc, 1877); Chiquet ¿vols pegar una mirá? (Millá. El tenori de Alsabares, Elig, 1891); chic, chicot, chiquet, chiconiu... (RACV: Dicc.val. 1997).
En esta escaramuza de la Batalla de Valencia tenemos, por un lado, los incultos que defienden la ch secesionista: Jaume Roig, St. Vicent, Fenollar, Isabel de Villena, Pou, Ballester, Joan Esteve, Roiç de Corella, Exulve, Carbó, Cavanilles, Balader, la RACV, etc. En la trinchera opuesta, las figuras del cientifismo chipiritifláutico: el diario Levante, el Institut dEstudis Catalans, el Ribó Canut catalán de EU, la Ciscar, Gloria Marcos, Tarancón, Rita Barberá, un señor que manda en el PSPV, San Zaplana y su academia de Ascensión, etc.
Ustedes verán: Isabel de Villena versus Tarancón; Jaume Roig versus Rita Barberá; Fenollar versus Ferranet del Levante...
Diario de Valencia 10 de Febrero de 2002